El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), con apoyo del Bureau Federal de Investigaciones (FBI), capturó a José Eliseo Amaya Palacios, un líder de alto rango de la Mara Salvatrucha (MS-13) en la Costa Este de Estados Unidos.
Amaya Palacios, de nacionalidad salvadoreña, enfrenta cargos por violaciones migratorias y reingreso ilegal tras haber sido deportado el 9 de octubre de 2015.
La detención, reportada por fuentes en X y confirmada por comunicados oficiales de ICE, se llevó a cabo como parte de operativos contra líderes pandilleros en estados como Nueva York, Maryland, y Virginia, donde la MS-13 mantiene una fuerte presencia.
Amaya Palacios, identificado como un miembro activo de la pandilla, fue acusado de coordinar actividades delictivas, incluyendo extorsión, narcotráfico, y homicidios.
Las autoridades lo trasladaron a un centro de detención migratoria mientras se procesan los cargos por reingreso ilegal, que podrían resultar en hasta 7 años de prisión según el Código de Estados Unidos.
La captura de Amaya Palacios refleja la prioridad de la administración Trump de combatir a la MS-13 mediante políticas migratorias estrictas, pero también resalta tensiones con El Salvador.
El presidente Nayib Bukele, aliado de Trump en la lucha contra pandillas, ha solicitado la deportación de líderes de la MS-13 a cárceles como el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), según CNN.
Sin embargo, casos de deportaciones erróneas han generado críticas sobre el debido proceso, especialmente tras la controversia con Abrego García, quien fue enviado a CECOT sin cargos formales.
Mientras José Eliseo Amaya Palacios espera su proceso judicial, la comunidad de la Costa Este permanece alerta ante la actividad de la MS-13.

